"Palabras de amor" de Pilar Alonso Ibáñez La experiencia te dice que, a medida en que el tiempo va pasando, nunca sabes quién te va a abrir la siguiente puerta y en ocasiones te encuentras con insólitas sorpresas que destacan entre la ingente cantidad de "noes" encontrados. Me hallaba un día cualquiera de hace ya varias semanas en la ciudad de Vitoria, promocionando mi sexta publicación "¿Y por qué no?" , cuando, nuevamente, se abrió una puerta. Una vez me hube presentado como escritor que promociona así sus obras, la mujer, que atendió rápidamente a mis palabras, hizo, de pronto, un ademán con su mano derecha, indicándome que esperara. Tras todo ello, cerró su puerta. Como supondréis, ante tal actuación, una duda creciente comenzó a originarse en mi cabeza. ¿A qué tendría que esperar? ¿Me atendería? Pasaban los segundos y, allí, en el descansillo de una de las plantas de cualquier portal que conformara una de las calles de la ciudad, no ocurrí...