Javier, con 6 años, conoció al escritor errante

 

Javier, un jovencísimo lector protagonista

El título con el que he querido presentar esta entrada refleja muy bien la esencia de esta literatura errante que un buen día de octubre de 2011 este escritor desconocido decidió emprender. 

Sucedió este sábado en Pradillo. Literaria Kalean, tal y como acostumbra en sus Rutas Literarias, presentaba sus títulos de ficción, no ficción y narrativa infantil a los que quisieron celebrar la XI fiesta de las almazuelas colgadas cuando, de pronto, volvieron a escuchar mis oídos unas palabras colmadas de mágia: 

"¿Tú no serás el que escribió "Soy un gusano?" inquirieron.

Al asentir, la mujer me hizo saber que, en su día, y de esto ya han pasado la friolera de 9 años, llamé a su puerta en uno de los edificios de la capital riojana presentándome como escritor que buscaba lectores. Ella, lógicamente sorprendida, no cerró la puerta, ni desatendió aquella curiosa oportunidad que se le presentaba, sino que actuó como una buena madre que apuesta firmemente por ofrecer valores a sus pequeños. Y es que, aquel lejano día, Javier, con tan solo 6 años de edad, se encontraba en casa. 

"Javier, acércate, ven a escuchar a este chico que ha escrito este libro"

Javier se aproximó al umbral del piso en el que residía y bajo la muda atención del felpudo que daba la bienvenida al hogar, sus pequeños oídos supieron de mi historia. Ambos adquirieron "Soy un gusano" dedicado al nombre del pequeño y ahí quedó la cosa. 

Pues bien, el caso es que, por fortuna, el tiempo ha dado sus frutos porque según me comentaron el pasado sábado 19 en Pradillo, Javier -el alto muchacho logroñés con el que comparto la cabecera de esta entrada- se ha convertido en un avezado lector. ¡Y lo es en plena adolescencia! Además, él mismo sacó su cartera y se hizo con mi obra de no ficción "¿Y por qué no? El empeño de un escritor errante por conocer a sus lectores". 

No me cabe la menor duda de que en una próxima edición de esta obra Javier podría perfectamente conformarse como protagonista de sus verídicas páginas. Porque desde peque le han brindado un camino, más arduo quizá, pero ciertamente satisfactorio. Es decir, el camino del hábito lector. Y hay que sentirse afortunado debido a que la lectura no es más que una puerta abierta a un mundo colmado de posibilidades. 

Entre las experiencias con otros muchos lectores que dieron y dan protagonismo a esta literatura errante en Pradillo, he querido señalar esta curiosidad que me dice que, si realmente te lo propones, un mundo diferente es posible. 

Gracias Javier, por formar parte de esta historia.

"Para que surja lo posible, 

es necesario intentar una y otra vez lo imposible"

Herman Hesse

 

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